El guardián invisible es la primera entrega de la trilogía del Baztán que se desarrolla en Navarra, en el valle del mismo nombre. El segundo libro es El Legado de los Huesos que también está publicado y el tercero y que aún no se ha publicado pero que ya está escrito se llamará Ofrenda a la Tormenta.
Datos del libro.
Autora: Dolores Redondo
Nº de páginas: 440
Año de publicación: 2013
Editorial: Destino
Sinopsis.
Elizondo |
Amaia Salazar, inspectora de la Policía Foral de Navarra, se ha formado en Estados Unidos con el FBI y está especializada en casos de asesinos en serie. Su preparación, junto con el hecho de ser originaria de Elizondo, propicia que la elijan para llevar este caso.
Pero Amaia no sólo ha de enfrentarse a un asesino en serie que mata menores de edad, sino también a las creencias populares de la mitología vasco-navarra y a sus propios fantasmas que tienen que ver con su familia y que sacarán a la luz sus miedos después de años ocultos. Si alguien ha viajado por esos pueblos sabrá que son muy típicas este tipo de leyendas sobre rituales y brujas que además se suelen explotar de cara al turismo por ejemplo en Zugarramurdi, Urdazubi, etc.
Basajaun |
Además la investigación llevará a la protagonista contra las cuerdas al verse involucrados miembros de su familia con los que existe una tensa relación desde hace muchos años. No es un libro de esos en los que los investigadores son el vehículo para el caso pero de los que apenas descubriremos nada. En este libro conoceremos todo de Amaia, sus miedos, sus alegrías, como se siente en cada momento, su anhelo por ser madre y lo que siente cuando parce que eso se le niega. En definitiva veremos personajes con los que identificarnos, muy humanos, nada fríos ni lejanos.
El pueblo de Elizondo aparece descrito en cada capítulo, veremos como la inspectora se mueve por cada calle, el río, la iglesia, todo quedará descrito a la perfección así que quienes seáis de por allí seguramente os veréis aún más inmersos en la trama sí cabe.
Es un libro que recomiendo sin lugar a dudas, y de hecho ya mismo estoy deseando empezar el segundo de la trilogía puesto que me ha quedado la sensación de que los fantasmas de Amaia no han salido del todo a la luz y que en esa parte de la historia aun quedan cosas por descubrir. Porque si algo tiene este libro es que no solo te enganchará la historia de los asesinatos de las niñas, sino que también te enganchará tanto o más la historia personal de la protagonista. No quiero que penséis que leído uno ya estás obligado a leer el resto. El caso propiamente dicho, la investigación de los asesinatos, queda cerrado. Simplemente son flecos que quedarán colgando y esos flecos creo que llevan a continuar las historia en el segundo libro.
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